La iniciativa de transportar un órgano a través de un dron fue del Centro Médico de la Universidad de Maryland, quienes el 19 de abril hicieron la prueba que resultó ser todo un éxito: el proceso llevó menos tiempo y fue menos costoso.
El paciente, destinatario del riñón, era una mujer de 44 años de Baltimore (Maryland, EE.UU.) que había estado 8 años en diálisis. El avión no tripulado partió por la noche del consultorio médico y aterrizó en el hospital. Recorrió 4,5 kilómetros, a unos 120 metros del asfalto, en diez minutos, mientras que el método convencional para el transporte de órganos (avión, helicóptero, etc.) cuesta al menos 5.000 dólares promedio y suele registrar retrasos.
Según la United Network for Organ Sharing, el año pasado había cerca de 114.000 personas en listas de espera para ser trasplantadas y el 1,5% los de envíos de órganos de donantes fallecidos no llegaron a su destino previsto.
El dron fue adaptado para soportar el peso del órgano y su viaje estuvo monitoreado todo el tiempo a través de cámaras. La paciente pudo ser operada y el trasplante fue todo un éxito.
Radio Unyka / filonews